jueves, 17 de mayo de 2012

En preguntas y respuestas: ¿Voy a depender siempre de mis padres?

"¿Voy a conseguir la independencia económica, o voy a depender siempre de mis padres?" Jose - España 13/05/2012 

Hola, me gusta mucho tu pagina, me motiva bastante, pero me gustaría que me aconsejaras sobre mi problema o que me indicaras el camino. Verás, te cuento mi historia: 

Desde que era niño, en mi familia siempre a habido mal lenguaje, grosería, sobre todo por parte de mi padre que encima que tiene unas maneras horribles de decir las cosas, debido a su escasa educacion, encima tenia problemas de alcohol y ludopatia, y como estaba mal con él mismo, desde niño siempre me decia que era un vago y que no iba a valer para nada. E incluso cuando intentaba hacer algo me decía -quita de aquí vete a tomar por ---- que no vales para nada-. Durante mi adolescencia y mi pubertad me hice heavy, con pelo largo, rebelde y sentia como que no me merecia nada de lo que obtenía, a pesar de eso tenia ilusion por prosperar y por aprender, y soñaba con ser un gran guitarrista de rock, y esto me inspiraba para trabajar.


El caso es que en cuanto un jefe, compañero o superior me regañaba por algo, desde ese momento me sentia frustrado, cabreado, despreciado y humillado, y entonces mandaba a hacer puñetas el trabajo y me largaba. El caso es que entonces era mas joven ,o bien encontraba otro trabajo, o simplemente cobraba el paro y pasaba de trabajar, y creo que no por que fuese un vago, simplemente porque no queria aguantar un desprecio o una regañina o simplemente por no ver a un comnpañero de trabajo que no me caia bien. Y asi he seguido durante muchos años. 

A la edad de 22 o 23 años,estaba casi siempre en el paro, porque no aguantaba en ningun trabajo, fumaba porros y bebia vastante alcohol, me sentia incomprendido, solo y muy frustrado. Hasta que conoci por casualidad a una chica ecuatoriana y empece a salir con ella, pero yo, con mi mismo rollo. Desde el principio a habido muchos conflictos, tanto de relación con ella, como con su familia y, bueno, con todo el mundo! ,por mi forma de ser. 

El caso es que mi padre, al verme trabajando, me firma para un piso, y no por que yo se lo pidiera sino porque él se empeño en ello, no me dejaba hasta que me convenció, y es que él queria beneficiarse de la transaccion y apoderarse de 12.000 euros para él. Bueno el caso es que me fui a vivir con mi pareja, empece a beber alcohol de diario, porros, jugar a las maquinas, tomar cocaína, y yo creia que era porque ella no era cariñosa conmigo, pero yo creo que hiba arrastrando todo lo de atrás.

El caso es que, de repente, me quede sin trabajo, mi padre me echó del piso, lo vendio y me quede debiendo 12.000 euros. Me fui a vivir con ella a un piso de alquiler, quería empezar de nuevo, pero el resentimiento. el poco apoyo que obtenía de ella y mis preocupaciones, acabaron por romper la relación.

Ya han pasado 3 años mas o manos de esto, y ahora vivo con mis padres, luchando por cambiar mi mente, mis creencias, mi vida. Llevo 2 años haciendo cursos del servef, y no se que pasa, en cuanto me dicen que hago algo mal me cabreo, me dan ganas de abandonar, y si no, abandono. Mi actitud en el curso es de dejadez y de pasar de todo. 

Ahora tengo 37 años, tengo deudas pendientes y ya han pasado por el juzgado con la condena correspondiente. He dejado de fumar porros, apenas bebo alcohol, a escepcion de algún dia señalado que me bebo algun cubatica. He leido muchos libros de autoayuda, voy a clases de maditacion y medito practicamente todos los días, he ido a psicologos de la seguridad social, y la verdad que lucho por cambiar mi actitud ante el trabajo y la autoridad, pero, hasta ahora, sigo viviendo con mis padres, sin trabajo, sin pareja, e intento seguir luchando por romper este muro psicológico que me impide avanzar.

Estoy estancado,y me pregunto ¿voy a conseguir la independencia economica, o voy a depender siempre de mis padres?, ¿habrá una decente para mi, un amor, una casa, un equilibrio?, ¿voy a trabajar o voy a ser siempre un mantenido?, ¿acaso no soy capaz de ganar mi propio dinero?, ¿porque no se ganarme el pan como todo el mundo? Son pregutas que de momento no tienen respuesta. Intento ser una persona lo mas equilibrada posible, pero a veces me da la sensación que mis esfuerzos son en vano. Soy consciente de que soy mejor persona, mas equilibrado, pero el tema de la frustración por el trabajo, o cursos, o sea lo que sea lo que haga, lo llevo un poco chungito.

Bueno lo he intentado acortar todo lo que he podido y ahora mismo me da la sensación que me dejo algo en el tintero,espero que esta carta pueda ayudar a alguien, aunque si te soy sincero, a la persona que primero quiero ayudar es a mí mismo.

Respuesta:

Hola Jose, la verdad es que es muy duro lo que me cuentas. Tu vida nunca ha sido fácil, has carecido de la motivación, confianza, y respeto que todos nos merecemos cuando somos niños. Prácticamente no has tenido en tu vida un periodo de estabilidad, seguridad y confianza. Han pasado muchos años y te encuentras todavía con la inseguridad de qué te deparará el día de mañana, de si será aún peor que el día de hoy. Eso se tiene que acabar ya. No puedes seguir ni un año más en este estado. Debes vivir la vida de forma distinta, tienes que experimentar la muy agradable sensación de tener confianza en ti mismo, independientemente de las opiniones de los demás, tienes que sentirte al mando de tu vida, sentir que tienes cogido fuertemente el timón de tu futuro, sin que nadie pueda desviarte de tu rumbo. Ha llegado el momento de convertirte en la persona que siempre has deseado, porque esa persona en la que deseas convertirte está mas cerca de lo que te imaginas. De hecho está dentro de ti, esperando a que llegue el día en que la despiertes, y ese día ha llegado.

Me alegro de que hayas me hayas escrito y estés en un el punto de no retorno. Este punto es cuando llega el momento en el que ya no estamos dispuestos a seguir viviendo así, en el que estamos decididos a darlo todo, en el que sentimos una fuerza interior que nos dice: “Ahora o nunca”. Tu momento ha llegado, y estoy seguro de que los consejos que te voy a dar los vas a poner en práctica, haciendo que tu vida nunca más vuelva a parecerse a la de todos estos años atrás. No va a ser fácil, va a requerir mucho esfuerzo de tu parte, pero la persona que todos llevamos dentro, aquella que lucha con toda su fuerza, una vez despertada, es imparable.

Antes de empezar quiero que sepas que, aunque la mayoría de tus preguntas son sobre tu economía y estabilidad laboral, debemos de atender primero qué es lo que provoca esa inestabilidad en tu vida. Así llegaremos a la raíz del problema y, resolviendo esta, se resolverán muchos de tus problemas. Dicho esto, lo primero que debes saber es por qué tu fuerza interior está dormida, después debes saber cómo despertarla y, por último, cómo mantenerla despierta. Empecemos.


Por qué tu fuerza interior está dormida.

Todos nacemos con una fuerza interior muy poderosa. Esa fuerza nos ayudó a comenzar a andar, hablar, correr, saltar, y a nunca rendimos hasta conseguir lo que queríamos. Los niños pequeños son bien conocidos por su tenacidad cuando quieren conseguir algo, la cual desespera a muchos padres. Pero eso es tan solo una pequeña parte de la fuerza interior que poseemos para conseguir nuestros objetivos. Desgraciadamente, con el paso de los años “aprendemos” a limitar esa fuerza hasta el punto de dormirla. Esto puede deberse, en tu caso, a los comentarios negativos de tu padre hacia tu persona.

Todos los padres deben ser conscientes de que cualquier cosa que le digan a sus hijos sobre ellos, estos creerán que es cierto, independientemente de si se lo dijeron en un momento de tensión o no. Para ellos, sus padres nunca están equivocados. Este es un sistema natural de supervivencia propia de los niños. En caso de que el niño crea que puede hacer algo, pero los padres vean que sería peligroso, si estos le dicen que es peligroso, el niño creerá más a sus padres que a sí mismo, por lo que desistirá de hacer lo que quería y, de esa forma, quedará fuera de peligro.

Sin embargo, muchos padres desconocen este sistema natural de protección, el cual hace que los niños confíen plenamente en que lo que dicen sus padres es cierto. Desconocen que la mente de los niños está preparada en esa etapa para ser “programada” por sus padres. Si le dicen “no te acerques al precipicio porque te puedes caer” o “nunca comas nada que esté en el suelo de la calle”, esto quedará grabado en el subconsciente del niño durante muchos años, pues es vital para su supervivencia. Pero ¿qué pasa cuando un padre le dice a su hijo “eres un vago”, o “nunca valdrás para nada”? El niño recoge esas palabras como ciertas, y quedan programadas en su subconsciente. Resulta que ahora tenemos un problema; en la misma zona donde tenemos almacenadas importantes advertencias que nos protegen, también tenemos frases destructivas, que, inconscientemente, creemos igual de ciertas e importantes. De ahí que nunca me canse de decir a los padres que nunca digan nada a sus hijos que no quieran que se haga realidad cuando sean adultos.

Tu padre te programó, sin saberlo, mediante afirmaciones negativas y destructivas para un fracaso seguro. Pero ahora que sabes esto, es muy importante que no le guardes rencor. Más adelante te explico por qué. No eres el único a quien le ha pasado, a mí también me sucedió lo mismo. Creo que pertenecemos a una generación en la que se creía que lo que se dijera a los niños no tendría repercusiones en su vida adulta. Pero la buena noticia es que se puede remediar.

Una vez que tenías grabado en tu subconsciente afirmaciones negativas sobre tu persona, las aceptaste como verdaderas. De hecho, es posible que cuando te pasa algo negativo en tu vida digas frases como “¡Es que soy tonto!”, o “nunca lo lograré”, o “soy un fracaso”. Si te das cuenta, son las mismas, o parecidas, afirmaciones que tu padre te decía cuando eras pequeño. Y con cada vez que tú te las vuelvas a decir, estarás reafirmando y grabando más profundamente en tu subconsciente las palabras de tu padre. Por eso, a partir de ahora, prohibido decirte expresiones negativas sobre tu persona. No alimentes ni una sola vez más esos pensamientos destructivos.

El hecho de que te enfades cuando alguien te infravalora es muestra de una carencia, la necesidad de aprobación. Principalmente la raíz del problema viene de la infancia, cuando un niño necesita sentirse aprobado por sus padres. Desgraciadamente no has tenido esto por parte de tu padre, lo que explicaría tu reacción cuando alguien desaprueba algo que has dicho o hecho. Más que un enfado con la otra persona, es un enfado contra ti mismo, contra tu infancia, contra esa carencia. Nos estamos metiendo en psicología profunda, pero lo importante, y que quiero que entiendas, es que cuando te enfadas, muchas veces te enfadas contigo mismo, con la persona que actualmente eres y no te gustaría ser. Pero no te preocupes, esto también tiene solución.


Cómo despertar tu fuerza interior

Cuando cometas un error, o te arrepientas de algo, debes esforzarte por no culparte. Esto es algo que todos debemos tener muy presente. Fuera culpas. Si has cometido un error, piensa en cómo puedes evitar volver a cometerlo la próxima vez. Para ello, medita sin sentimiento de culpa sobre lo sucedido, sobre las otras muchas opciones que tenías para haber actuado de forma diferente, y sobre cómo actuarás la próxima vez que se te presente la misma situación. Sólo si no hicieras nada por mejorar, deberías tener sentimientos de culpa, pero nunca por el simple hecho de haber cometido el primer error. Incluso si, cuando se dé la misma situación, no has conseguido actuar al cien por cien como tú querías, pero has mejorado bastante, debes sentirte bien contigo mismo, concentrándote más en el progreso conseguido que en hecho de no haber actuado exactamente como deseabas.


Cuidado con las decisiones que tomes

Un estudio reciente realizado en el Centro Bernstein de Neurociencia Computaciional de Berlín por neurocientíficos, entre ellos John Dylan Haynes, el cual ha publicado los resultados en la revista Nature Neuroscience, revela  que las decisiones, al contrario de lo que se creía, no las toma nuestra mente consciente, sino nuestra mente subconsciente,  llegando a la mente consciente diez segundos más tarde. Esto explicaría porqué muchas personas tienen sentimientos de culpa después de haber actuado de manera equivocada e impulsiva. Si somos personas que no esperamos esos diez segundos antes de actuar o hablar, seremos propensos a cometer muchos errores en nuestra vida, debido a las malas decisiones que tomaríamos. Sin embargo, dado que no podemos estar continuamente pidiendo perdón a todos por tomar malas decisiones, lo cual sería letal para nuestra autoestima y la confianza en nosotros mismos, dejamos que las decisiones que tomamos sigan su curso, aunque después sean equivocadas. ¿A quien no le ha pasado que, después de una discusión, nos damos cuenta de que hemos dicho cosas que no debíamos haber dicho, pero nos cuesta muchísimo pedir perdón y reconocer que nos hemos equivocado?

Lo importante es que entiendas que debemos esperar y meditar antes de actuar, para hacerlo de manera consciente, en vez de inconsciente. Cuando sientas la tentación de actuar de manera impulsiva, quizás abandonando un trabajo, no te dejes llevar por el impulso de la mente inconsciente. Deja pasar la jornada laboral, y cuando estés a solas, relajado y en buenas condiciones para pensar, entonces toma las decisiones acertadas.
Cada vez que te vengan pensamientos negativos sobre ti, recházalos, pues ahora ya sabes su origen. Tu padre no tiene por qué tener razón en cuanto a la opinión que tiene de ti. No importa lo que los demás opinen de nosotros, siempre habrá personas que no compartan nuestras ideas. Lo único importante es lo que piensas tú de ti mismo, y que tus actos estén de acuerdo con la lista de valores que te hayas establecido.


Crea tu lista de valores

Los valores son nuestro conjunto de creencias sobre lo que está bien y lo que está mal, armonizando nuestra vida en función a ellos. Es muy importante inculcar unos valores a los hijos, pues les ayudará a saber actuar siempre de la forma correcta. En tu caso, tienes una lista de valores autolimitantes. Por ejemplo, unos padres que inculquen en su hijo que está mal decir “no” cuando los demás te piden favores, harán de su hijo una persona de la cual se aprovechan abusivamente los demás. Vivirá esclavizado, siempre teniendo tiempo para los demás, pero nunca para él, siempre haciendo cosas por los demás, pero nunca para él, una persona con falta de asertividad. Lo mismo sucede con otros valores que, aunque en un principio pueden parecer bondadosos, son destructivos para la persona que los posee.
Es momento de que crees una lista de valores realmente tuya. Para ello te doy algunos (de los muchos) puntos en los cuales pensar:

Decir siempre la verdad. Si lo piensas bien, detrás de una mentira se esconde un miedo. Miedo a un enfado, miedo a ser descubierto, miedo a dar una imagen ante los demás que no queremos, etc. La persona bondadosa y segura de si misma no tiene reparo en decir la verdad, pues sabe que lo que hace y dice es beneficioso para ella y los demás. Cuando alguien te pregunte algo y no le digas la verdad, piensa qué es lo que te impulsó a mentir. Normalmente mentimos para no revelar conductas que, aunque sabemos que no están bien, las llevamos a cabo. Pocas cosas hay que eleven tanto la autoestima que no tener que esconderse de nadie y decir siempre la verdad, seguros de que lo que hacemos es lo más correcto y amoroso.

Ser imparcial. No favorecer a una persona simplemente por que nos caiga bien, cuando hay otra que lo merece más. Esto entraría en el mismo campo que el sentido de la justicia. Dar a cada uno lo que realmente merece hace que nosotros recibamos de los demás lo que realmente merecemos, por supuesto no estoy diciendo que tengamos que vengarnos de los demás. En caso de tener unos valores elevados, todo lo que merezcamos será bueno, aunque no hay que olvidar que vivimos en un mundo injusto en muchos aspectos y que puede haber ocasiones en que no recibamos lo que merecemos.

Tratar a los demás como nos gustaría que nos trataran. Conocida como la regla aurea. Seguramente la conoces. Es excelente hacer que forme parte de nuestros valores.

Sentido de amistad. Ser fiel y ayudar a las amistades verdaderas es algo que no tiene precio. Simplemente es estar lado a lado, para lo bueno y para lo malo. Lógicamente hay amistades poco recomendables, las cuales pueden llevarnos por un mal camino, es entonces cuando debemos cortar la amistad y centrarnos en aquellas personas que nos hagan crecer en vez de menguar. Esto no es ser egoísta, simplemente tú quieres ir hacia el norte, pero tu amigo hacia el sur. Son caminos incompatibles, y es mejor que cada uno siga el suyo. No podemos ser amigos de cualquiera que se ponga por delante. Debemos de tener amistad sólo con aquellas personas afines a nuestros valores y objetivos, solo así evitaremos conflictos, y podremos ir juntos hacia la misma dirección.

Sentido del compromiso. Cuando nos comprometemos con alguien a hacer algo, hacerlo. No excusarnos ni evadir aquellas responsabilidades que nosotros mismos nos hemos impuesto. Es mejor que no te comprometas con nadie, a comprometerte y no cumplir tu compromiso.

Respeto por los demás. Aunque no compartamos la misma forma de pensar, siempre hemos de respetar a los demás. Si queremos ser respetados, respetemos primero nosotros. Cuando realmente respetamos es difícil caer en discusiones destructivas. No somos dueños de los pensamientos de nadie, cada uno tiene que elegir, y a nosotros nos toca respetarlo.

Hay muchos más valores que puedes añadir a tu lista de valores. Lo importante es que sea tú quien decidas qué valores añadirás y respetaras, no pasándolos por alto nunca. Ten en cuenta que tus valores son lo que te identifica como persona. Si te cuesta identificar más valores, puedes buscar en internet por “lista de valores”, encontrarás ideas válidas.

Una vez creada tu lista de valores, trabaja por desarrollarlos de forma intensa, como si de ello dependiera tu vida. De hecho, el futuro que deseas para ti, depende en gran manera de que los desarrolles o no.

Llegó el momento de arrancar las raíces de las ideas negativas sobre tu persona, que desde niño te ahogan, para plantar en su lugar las semillas de los valores que has decidido. Esto se hace de la siguiente manera. Presta la máxima atención a como reaccionas en cada aspecto de tu vida. Lo que acabas de hacer o decir, ¿refleja tu vieja personalidad  o, por el contrario, está en armonía con la nueva personalidad que estás cultivando? Si refleja tu anterior personalidad, comprométete a no reaccionar de la misma manera en la siguiente ocasión, y no pienses más en ello, no te culpes, piensa que a partir de ahora cambiarás cada vez a mejor.

Nuestra mente cree aquello que le decimos, por lo tanto, nunca vuelvas a decir que no lograrás algo. Fuera también frases tipo “debería hacer”, “tengo que…”, “quisiera…”, “necesitaría…”, etc. Pensar así, es decirte a ti mismo que no confías en ti. Debes decir en su lugar: “Voy a hacer…”, “necesito…”, o “quiero…”. Frases que, en vez de transmitir que debes ponerte en acción, transmitan la idea de que ya estás en acción.


Aprende a gestionar tus emociones

Es muy importante que sepas gestionar bien tus emociones. Un tema del cual voy a hablar próximamente aquí, en AutoayudaEficaz.com. Seguro que te es muy útil. Pronto saldrá publicado.


Perdonar a tu padre es necesario

Cuando guardamos resentimiento hacia alguien, nos atamos emocionalmente a ese alguien, impidiendo desprendernos de emociones negativas y dejando que esa persona condicione nuestra vida. Piensa que tu padre ha actuado en muchas ocasiones sin saber la repercusión que tendrían sus palabras en tu futuro. Sin embargo, no se trata de culpabilizar a tu padre. Es cierto que cuando no sabemos la raíz de nuestros problemas estamos condicionados a ellos, pero, una vez identificada la raíz, somos nosotros los únicos responsables de desarraigarla. Tu padre ha sido sin saberlo, responsable de mucho de lo que te ha pasado, pero si la situación no cambia a partir de ahora, ya no serás solo tu padre el responsable, sino que tú también lo serías por no querer pagar el esfuerzo que se requiere para ello. De todas formas, estoy convencido de que lo vas a lograr, pues en tus palabras puedo ver que estás en el mejor momento de tu vida para provocar un cambio en tu persona. El perdón, a diferencia de lo que muchas personas creen, es más beneficioso para la persona que perdona, que para la que es perdonada. Te ayuda a estar en paz contigo mismo, a no tener cuentas pendientes con nadie y poder concentrarte cien por cien en tu persona. He escrito un artículo sobre el perdón titulado “El poder del perdón”. Te será muy útil leerlo, si no lo has hecho ya.

Para poder perdonar a tu padre es necesario elegir un momento en el que ambos estéis tranquilos en un lugar en el cual no haya ninguna distracción. Podéis pasear por alguna zona tranquila, un parque, sentaros en un banco, etc. No sería efectivo intentar tener en casa esta importante conversación, pues las interrupciones le restarían importancia y eficacia. Dependiendo de la confianza que tengas con tu padre, podrías decir en tus palabras: “En mi vida he cometido muchos errores, y quiero que sepas que, aunque a muchas personas les cuesta reconocerlo, yo soy consciente de ellos. Por eso te pido perdón por aquellos momentos en los que te he hecho sentir mal”. Ahora debes hacer una pausa para que tu padre pueda asimilar tus palabras. Quizás tardará treinta segundos en darte una respuesta. Puede que la respuesta sea que él también te pide perdón por las veces en que te ha hecho sentir mal. Si esto sucede, aprovecha la ocasión para decirle que por supuesto le perdonas, que no le guardas ningún rencor, y que todo lo pasado ya no cuenta.

Si tu padre no reacciona pidiéndote perdón, debes hacerle saber que no quieres guardar rencor a nadie, diciendo algo parecido a: “Durante mucho tiempo he guardado rencor a muchas personas, pero no quiero seguir así. Hay personas que puede que no sepan que me han hecho daño, pero quiero perdonarlas. Quizás no lo sepas, pero en varias ocasiones, cuando nos hemos enfadado, me han dolido algunas palabras que me has dicho”. Es importante que no entres en detallar que palabras te han dolido, ve directo al perdón. “Pero quiero que sepas que no te guardo rencor y quiero que nos perdonemos por el daño que nos hayamos podido hacer. Por mi parte, ya lo he hecho”. En ese mismo momento sentirás un gran alivio, y, cuando terminéis la conversación, verás tu vida con otros ojos. Este paso es imprescindible para que tu vida mejore. En caso de que no te sea posible hablar cara a cara, quizás por la reacción que suela tener tu padre, puedes hacerlo mediante una carta.


Ten confianza en los demás, en sus consejos y cariño

Es verdad que puede que los demás hayan provocado en ti mucho dolor, pero muchas veces es por tomar nosotros mismos malas decisiones. Ya te he hablado sobre las amistades. Debemos saber con qué personas tratamos y diferenciar a aquellas que nos pueden hacer bien de las que nos pueden traer dificultades. De todas formas, con tu lista de valores tendrás bien claro con qué personas debes compartir tu vida y amistad. Cuanto más se parezcan sus valores a los tuyos, más recomendables serán para ti, y tú para ellas. Una vez que te rodees de personas que armonicen con la vida que deseas, llegará el momento de confiar en ellas, en su cariño y sus consejos. De todas formas, los consejos son eso, consejos, no órdenes, por lo que sólo a ti te corresponde llevarlos a la práctica o no.


Confía en ti

Para ello escribí un artículo titulado “La confianza en unomismo”, te lo recomiendo.


¿Necesitas el apoyo de los demás?

Me comentas que tu pareja no te apoyaba. Está bien tener el apoyo de los demás, sobre todo si nos falta fuerza interior, pero a partir de ahora niégate a depender de la ayuda y el apoyo de los demás. Es más fácil avanzar si te apoyan, pero no es imprescindible contar con el apoyo de los demás. Piensa que eres dueño de tu vida, y nadie tiene que decirte lo que debes hacer y no hacer, aunque pueden aconsejarte. Pero si necesitas el apoyo de los demás para actuar, será difícil conseguir algo en la vida. Piensa que, si pones en práctica todo lo que te explico, tendrás la fuerza necesaria, no solamente para avanzar tú, sino para ayudar a más personas de tu entorno a avanzar. Cuando lo consigas llegará un punto en el que cualquier persona, por el simple hecho de estar a tu lado, crecerá como persona, pues transmitirás mucha fuerza interior, seguridad, felicidad, autoestima, decisión y amor por los demás.


Reacciones a la crítica

Estoy seguro de que muy pronto, una de tus mayores preocupaciones: tu reacción cuando te dicen que haces algo mal, desaparecerá. ¿Por qué? Muy sencillo; por que lo que lo que dictará que has actuado bien o mal no será la opinión de los demás, sino tus valores. Cuando desconocemos nuestros valores, o no los tenemos bien definidos, lo que marca si hemos actuado bien o mal son los valores de los demás. El problema es que cada persona tiene unos valores distintos, dependiendo de sus objetivos en la vida. Si tú has actuado de forma acorde a tus valores, y te digan que no has debido actuar así, no te sentirás provocado. Y si te dieras cuenta de que efectivamente te has equivocado, tampoco te sentirás provocado, pues rectificarás, no por los demás, sino porque lo que has hecho no concuerda con tus valores. Será entonces cuando no te cueste reconocer el error y pedir disculpas. Sentirás que tú marcas el camino en tu vida, no los demás. Esto no quiere decir que no tengas en cuenta la opinión de los demás. A veces es bueno ceder y complacer si no va en contra de nuestros valores. Simplemente se trata de ser flexibles, pero leales a nosotros mismos.


Mantén tu fuerza interior despierta

Para lograr un efecto duradero en los cambios que harás, es necesario que si en algún momento bajas el ritmo, vuelvas a leer todo lo que te he escrito. Todas las fuentes de motivación en nuestra vida, ya sea un libro, una conferencia, un artículo de una web, etc, debemos conservarlos para futuras ocasiones. Pensar en cómo estabas antes y en cómo estarías en la actualidad si no hubieras cambiado, te ayudará a reafirmarte en tu nueva vida.

Bueno Jose, hasta aquí mis consejos, de momento, pues quiero recomendarte algunos audios y libros que te ayudarán de forma efectiva en lo relacionado a las deudas, ahorro y trabajo. Si tienes alguna duda, puedes preguntarme nuevamente. Mucho ánimo y gracias por compartir tu experiencia.


Julio González.


¿Te inquieta algo?
¿Quieres que te ayude en algún aspecto de tu personalidad?
¿Tienes dudas sobre actuar de una forma o de otra?
Mándame tu pregunta, en breve tendrás tu respuesta publicada en esta sección junto con tu pregunta.